sábado, 30 de julio de 2011

La tarta de mi madre.

Quiero dedicarle a mi madre y a mi padre, los buenos momentos que siempre me han dado, pero en especial, el apoyo y el cariño incondicional que siempre he sentido, y eso, no sé como expresarlo, ni como transmitirlo a las personas que puedan leer ésto, pero como me decía mi padre, hasta que no seas padre, no sabrás muchas cosas, (y como casi siempre, por no decir siempre), tenía razón. Pero el poner primero a mi madre delante de mi padre, no es por nada, ya que no sería justo, son mis padres, y los quiero un montón, es simplemente que voy a resumir, todo lo que podríamos estar hablando de los padres, en algo muy simple, y es la tarta de chocolate con galletas que hace mi madre.
Desde que era pequeño, mi hermano y yo, siempre hemos  "llorado" sólo por verla, y que ahora, mis hijos,  y toda la gente que me quiere y que quiero, al probarla, sabrán a lo que me refiero.
 En los bares la llaman la tarta de la abuela, pero nunca podrá saber  igual, ya que la tarta de mi madre, solo con  el cariño, sus mezclas, (ya que donde pone 150 gramos de chocolate, ella echa el doble...), y su dedicación, nunca será igual que las industrializadas.
El cucharón que siempre chupo, una vez que se ha mezclado el chocolate, previamente mezclado con leche, mantequilla y azucar...o sea...una pasada.

Comienza la guerra...

El bol de la izquierda es el de barro, lo recuerdo desde que nací y es donde al final, con lo que sobra, meto los dedos y , bueno...lloro de pensar los chupones que doy.


Mojando las galletas en leche, las va colocando una junto a la otra.

Rocia con leche,un poco las galletas colocadas...



Y sigue el proceso con más capas. Ya me ha echado una bronquilla por haber metido el dedo en el bol de barrro, pero...no podía aguantarme.




Mientras tanto, mi padre en el mortero va machacando panchitos, y con el rabillo del ojo me controlan, para que no vaya con el dedito...quitando chocolate.

Mi padre dale, que dale...

Una vez que las capas están terminadas, y a mí ya no me quedan lágrimas, ni saliva en la boca...

...termina, echándole los panchitos por encima. La bandeja es otra, ya que hizo dos y la primera ya estaba en el frigo...
Quiero felicitar a mi hermano por sus 50 años que ayer le cayeron en su mochila, y darle las gracias por su apoyo y las sonrisas que siempre me saca, el buen rollo que me da y por los siguientes 50 años de compañía que sé que me quedan junto a él.

Mientars escribo éste pequeño "articulillo", sólo pienso en el trozo de tarta que todavía me espera, después de comer....Gracias papás.

martes, 26 de julio de 2011

Dos formas de ver las cosas.

Normalmente hay dos formas de ver las cosas, aunque los dos busquen lo mismo, en este caso es el viento. Unos lo utilizan de una manera, y otros de otra, unos creen que se mojan mas y otros que se mojan menos, unos creen que necesitan más viento y otros necesitan menos, unos se quieren tumbar más, y otros se tumban menos, unos creen que tienen que ir en coche y otros creen que van andando...,pero eso es según quien lo mire...,pero lo que está claro es que los dos quieren lo mismo, y aunque a veces cueste, por las olas en unos casos y en otros por la arena, el viento es el que hace volar. Le quieren y él los quiere.Ya que el uno sin el otro no sería lo mismo.Yo quiero el viento, quiero que me roce, quiero que me toque, quiero abrigarme con él, y quiero mojarme, ya que lo merece.Me ha dado muchos momentos de alegría,  pero sin el Mar, de poco me sirve.
Mar Menor y Mar Mayor.
Mi gordi tumbándose.
En  Los Urrutias y  en La Manga.

Apoyado en el viento.

Volcándose en el viento.


Tomando camino.


En La Manga, frente Cabo de Palos.

Planeando la ola.

Los comienzos. Despegando.

Durante el vuelo.

Andando por el horizonte.


Rozando el MAr.

Acariciando el Mar.

Saltando obtáculos.

Agarrado.

Apoyado.

Observando lo siguiente.


Colgado.


Saltando la isla de la Hormiga.


Buscando la armonía.


Entrando a saco.


Atravesando.


Después de la ola, viene la tranquilidad.

Pero siempre saltando todo lo que se pone por delante. El viento y el MAr.

domingo, 24 de julio de 2011

Siempre se acuerdan de uno.

Una semana llevo de vacaciones y una semana me queda... la verdad  es que ya le iba cogiendo el gusto. No sé, si en el trabajo me echan de menos...para qué pensar en lo contrario, lo que sí sé, es que estarán deseando que vaya...ya que eso supone, que salen ellos..., para qué pensar en negativo, prefiero darle la vuelta a la tortilla y pensar que siempre se acuerdan de uno, aunque sea para perderme de vista de nuevo...

(En el trabajo). Por Dios Alfonso ven ya...que me voy yo.


(Mis amigos), Por Dios Alfonso vete ya...que nos dejes tranquilo...

(Yo). Por Dios que me toque la lotería...y pierdo de vista a todos...

Mientras tanto...seguiré con la colada.


Por dentro.



Limpias pero no revueltas...



La bajera.


Mi zapatero. Me gustó el modelo...y me compré unos cuantos...no me rozaban.

No eran mios.

viernes, 22 de julio de 2011

Capté y me captaron.

Nunca estoy esperando que pase algo o más bien a que pase alguien, pero en éste mes y pico que llevo con el blog, la verdad es que me anima a poner fotos que llevo realizadas a lo largo de éste año, y que he descubieto que me encanta compartirlas con todos los que me ven...así que, ya que estoy esperando a que se duerman los enanos, compartiré imagenes captadas y otras que me captarón...busque, compare y si encuentra algo mejor...dígamelo...
Bolso negro.

Negro entre dos rojas...


Para un lado y para otro.

Observando la nevera...

El pelo loco.

Tristeza.

Mas o menos de 8 meses...

Siempre hay uno que.....da la nota.  No te des la vuelta eh?

Mirar el pajarito.....

Como te pille yo...verás.


Gaviota intentando coser la vela...

Me captó.

Gracias Mar por captarme.

Seguidor esperando que me "conecte"para poner mis próximas fotos.